Quintillo Gavassa Mibelli
Resumen
Resumen
Impulsos del alma, afectos románticos que tienen los hombres cuando quieren ver crecer el mundo, aún devorando las distancias y los compromisos de la infancia, le ofrecieron a don Quintilio Gavassa Mibelli la feliz ventaja de sentir la piel resistente de otra raza que necesitaba el privilegio del trabaio organizado para desvanecer el sombrío panorama del atraso. Por esto se integró a Santander. Formó un hogar lucentísimo con una dama de claros pensamientos. Y se entregó plenamente, con alborozo, a la transformación de un pueblo que recoge con respeto su memoria.